Cerebro, sociedad y politica.

La trenza de los tres cabos que forman el conocimiento que en el siglo XXI tenemos del sistema nervioso, los factores de cambio sociales y la politica es dificil de desenredar. Esta triada convergente esta creando nuevos enfoques y perspectivas que trasforman el modo de vernos a nosotros mismos.
Cada cabo esta hecho de diversos subfilamentos. Del conocimiento del sistema nervioso tenemos la neuroingenieria o el conocimiento de la estructura diseño y funcion del sistema nervioso que nos permite intervenir fisicamente en él creando implantes, interfaces maquina/hombre que aumentan el modo de procesamiento de la informacion y donde la ciencia de la computacion o informatica añaden sus ideas.
Del conocimiento de los cambios sociales tenemos la cpacidad de simular redes sociales por ordenador y conocer patrones de comportamiento y trasmision de mensajes entre diversos nodos (personas o grupos) y predecir su comportamiento. La demografia, la economia e incluso la epidemiologia puede a traves de formulaciones matematicas predecir que la escasez de recursos, el incremento de la poblacion y los ciclos economicos recesivos son un mal cocktail que se traduce a nivel del sistema nerviosos central en una modificacion del cerebro mediado por el estres que si es cronico repercute en el funcionamiento psicologico e inmune.
Y de la politica, que los politicos deben legislar una nueva neurocultura.

Hay una creciente neurorealizacion del concepto de persona, o identidad neuroquimica, dicho de otro modo, nuestras penas, alegrias, sentimientos, pensamientos tal y como la neurociencia nos esta mostrando no son mas que un vasto ensamblaje de atomos y moleculas interactuando de forma precisa en tre si para dar lugar a nuesto mundo interior y experiencia psiciologica.
Esto impica que el conocimiento del alfabeto celular y molecular desde un punto de vista mecanicista (qué elementos componen el sistema y las leyes que lo rigen) de nuestro "yo" nos permite interferir, intervenir, manipular nuestra ipseidad.
Podemos crear terapias farmacologicas, ya no solo para restituir un deficit o paliar una dolencia (lo que la medicina convencional ha estado haciendo por milenios), tambien para incrementar una facultad o capacidad: psicocosmetica.
En relacion a la psicocosmetica la pregunta etica que surge es donde esta el limite o donde trazamos el limite entre restituir un deficit (antidepresivo) entendido como terapia y/o entre el aumento de nuestras capacidades a gusto o a la carta con las consecuencias y derivas politicas en terminos de igualdad dado que no todo el mundo podra costearse la psicocosmetica encaminada a perfeccionar ciertas competencias.

Tendremos que poner en marcha politicas dirigidas a la neuroseguridad. El conocimiento del sistema nervioso a nivel mecanicista implica un mayor conocimiento de como se estructura a nivel holistico los distintos componentes de este y esto pude dar lugar a "cartografias neuronales" o mapas detallados de las conexionaes y proyecciones de cada area con otras areas para saber como un estilo cognitivo o personalidad se traduce en el modo en que las redes neuronales trabajan (sus conexiones)Si a esto le sumamos el hecho de que las operaciones del cerebro son electrofisiologicas y los chips conducen electricidad como fuente de alimentacion para codificar informacion en bits, tenemos que podemos sintetizar cartografias neuronales(estilos cognitivos)en sofware para cagarlo o descargarlo. La pregunta futurista y ampliamente especulativa es podremos ser capaces de crear una cartografia neuronal de por ejemplo A. Hitler (con la ifnormacion historica y documental que tenemos de él) e implantar un chip neuronal a otra persona para crear su personalidad tipo en un futuro tirano.


En un mundo donde la distribucion del talento es cuestion de suerte o disposicion natural arbitraria y la ordenacion social es a cada cual segun sus meritos, los incentivos para hacer que la persona de talento trabaje mas es monetaria. Pero y cuando estemos en un mundo donde una mayor inteligencia, concentracion, capacidad de memoria, atencion y habilidades es cuestion de quien puje mas por tener unos rasgos mas perfectibles, resulta que la ordenacion social ya no se podra estructurar de la misma forma.
La trenza de los tres cabos (cerebro, sociedad y politica) cada dia va ser mas dificil de desenredar.