Desde un punto de visto socio-cultural cuando las cosas pintan negras en economia hay una emergencia de tendencias y fuerzas culturales que chocan en su contenido y direccion para negar la realidad, para ideologizarla.
Por un lado, se manifiesta una creciente oleada de films, escritos de difusion mediatica masiva (articulos periodisticos), novelas, comics que describen catastofres apocalipticas, el fin de los dias, o ponte a cubierto por lo que pueda pasar... que nos sumergen en la depresion más cronica. Alguien le suena la fecha 666 y el marketiniano estreno de una pelicula a colacion, las actulizaciones web de Al Qaeda con sus diatribas etc.
Pero menos mal, que por el otro lado, cuando las cosas siguen pintando negras en economia tambien surge una fuerza dinamica socio-cultural en direcion contraria.
El ejemplo más patente es el estreno de Superman (el hombre de acero, el superheroe que salvara el planeta de cualquier amenaza) o la valvula de escape del futbol (que casualidad!) que se convierte amenudo más que en un deporte para extraer virtudes y habilidades de las personas en el pan y circo moderno que solo extrae "escapismo" y desconexion, pero que de todas formas nos insufla felicidad y optimismo.
El cambio climatico, la amenza de una guerra nuclear, o lo que es peor o igual de peor, otro posible exceso de la politica externa de Bush en Iran, el cambio de una economia de crudo negro a otra de transicion al hidrogeno o en su defecto tecnologia "verde", la inflacion creciente y muy creciente en un entorno financiero volatil (no en vano en la reserva federal americana han puesto para sustituir a Greenspan a un experto en inflacion), el endeudamiento global... se oculta gracias a la maquinaria cultural.
Solo que es preferible que la maquinaria cultural nos hipnotize con Superman que con el Angel Caido.
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