Jessica Wright, periodista científica, nos cuenta las futuras promesas de la nanotecnología en la lucha contra el cáncer.
Wright nos explica como los fármacos de la quimioterapia matan las células cancerígenas que proliferan y se dividen, pero al mismo tiempo nos dice que uno de los grandes retos de la terapia contra el cáncer es cómo no matar las células saludables mientras se acaba con las células cancerígenas.
Los fármacos para combatir el cáncer llegan a los tumores a través de los vasos sanguíneos que bañan el resto del cuerpo. Por lo que envenenan tanto las células sanas como a las cancerígenas.
Lo investigadores trabajan para que estos fármacos se dirijan directamente al tejido cancerígeno con la intención de proteger al resto del cuerpo de medicación tóxica.
El optimismo actual se encuentra con un tipo de terapia contra el cáncer que se aprovecha de las rutas de señalización molecular de las células cancerígenas, pero sabiendo que el cáncer evoluciona para evadir este ataque.
Uno de las estrategias más simples dentro de esta vía de combate contra el cáncer es armar a la proteínas que son buscadas por el cáncer de drogas que matan células.
Estos anticuerpos que se adhieren al fármaco para combatir al cáncer se denominan conjugados droga-anticuerpo y similar a los anticuerpos monoclonales utilizados en la quimioterapia convencional entran en el tejido cancerígeno, pero armados con una droga tóxica pueden acabar con el tumor.
Pero estas moléculas inyectadas no saben dónde está el cancer y la mayoría de ellas se van a otra parte. Una solución es recubrirlos con una película o capa aislante que haga que las nanopartículas resultantes de no mas 200 nanómetros no escapen los vasos sanguíneos y se dirijan al tumor.
La nanotecnología todavía tiene mucho por delante para poder desarrollar todo su potencial pero la promesa de que un investigador pueda dirigir el fármaco directamente al tumor similar a como un GPS nos lleva a destino, puede llevarnos acabar con el cáncer y hacer que las personas tengan una vida razonable sin los efectos secundarios y las toxicidades, nos dice Mark Davis.
Mark Davis químico ingeniero en el Instituto Tecnológico de California en Pasadena cambió su linea de investigación en busca de nuevas drogas para combatir el cáncer cuando le prometió a su mujer que su muerte no sería en vano.
La ciencia, o mejor dicho la razón humana, algún día conocerá y se sobrepondrá a las leyes de la naturaleza gracias a gente como Mark Davis.
Wright, J. (2014). Nanotechnology: Deliver on a promise Nature, 509 (7502) DOI: 10.1038/509S58a
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