La neuroeconomía investiga las representaciones neuronales del valor, una idea central en la economía, identificado como la utilidad de las decisiones o el resultado final de un comportamiento.
El origen de la neuroeocnomía se remonta al progresivo distanciamiento de un grupo de psicólogos y economistas de la economía clásica tradicional que se sustentaba sobre un enfoque que veía al agente o actor económico como un ser racional que maximiza sus intereses.
Este enfoque es conocido como la teoría racional de la elección.
Este grupo de psicólogos y economistas pronto se dieron cuenta de que las personas no actuan siempre de un modo racional maximizando sus intereses en las decisiones que toman.
Estas divergencias de la racionalidad esperada se concretan en: probababilidades no-normativas (la diferencia entre 0% y 1% es más grande que la diferencia entre un 30% y un 31%) búsqueda incompleta del espacio de opciones (las personas dejan de buscar alternativas cuando llegan a un cierto umbral en lugar de escoger la mejor opción), dar un peso no uniforme a la utilidad (10 euros ahora frente a 10 euros mañana es mejor que 10 euros en 99 días o 10 euros en 100 días).
Los economistas comportamentales siguen usando la idea de valor y utilidad, pero no consideran que el comportamiento sea racional.
La neuroeconomía nace cuando estos economistas comportamentales empiezan a introducir datos de las técnicas de medición del cerebro como la resonancia magnética funcional entre los inputs y los outputs del comportamiento económico.
Con la neuroeconomía que investiga los sistemas neuronales detrás de ideas o conceptos ecocnómicos pronto se intenta estudiar como el valor y la utilidad se representa en comportamientos irracionales y uno de estos comportamientos puede ser el uso patológico de sustancias que pueden ser malas para uno: la adicción.
El comportamiento adictivo tiene muchos antecedentes causales y varía entre la iniciación, escalamiento y transición a la adicción entre persona y persona.
El trabajo en neurobiología de las ultimas décadas ha identificado la ruta de procesamiento de las recompensas identificando el área ventral tegmental y la proyección de neuronas dopaminas hasta zonas o regiones límbicas y paralímbicas.
Hay dos hipotesis contrapuestas que cohabitan en la ciencia de la adicción como explicación del uso y abuso de sustancias.
La teoría del procesamiento deficiente de las recompensas por la cual las personas tienen una repsuesta de recompensa más débil ante estímulos naturales recompensantes (sexo, comida...) y buscan con el abuso de sustancias y el alcohol incrementar la respuesta, es decir, activar estas regiones.
La teoría opuesta arguye que las rutas de procesamiento de las recompensas, la circuitería del estriato ventral, se activan indiscriminadamente y son hiperreactivas.
Dentro de la neuroconomia y del uso del espiritu de la neuroeocnomia para estudiar el fenomeno de la adiccion, nos encontramos dos ramas.
Por un lado, los neuroeconomistas que utilizan el modelo del refuerzo aprendido para entender cómo las personas acaban siendo adictas, y por el otro lado, la rama mas psicológica y comportamental que utiliza la elección intertemporal para estudiar la patología o hipervaloración que resulta ser el comportamiento adictivo.
Desde la primera rama se utiliza el aprendizaje reforzado como una formulación matemática donde el mecanismo que da lugar a una toma de decisión incorrecta por parte de los adictos es una señal de predicción del error disfuncional.
La predicción del error es un modo de decir que las personas decidimos en función de una expectativa de cómo van a ser las cosas y cómo de hecho llegan a ser.
Si a esto le sumamos que se han encontrado evidencias para poder implementar físicamente este mecanismo en la actividad fásica del comportamiento de las neuronas dopaminérgicas, esta rama de la neuroeconomía entiende la adicción como una representación equivocada de la recompensa que suscita el uso de una substancia.
La rama de la neuroeconomía mas psicológica entiende que la adicción es un fallo de la valoración, o mejor dicho, hipervaloración de algunos estímulos.
Con estudios de descuento temporal con adictos, la maquinaria de decision de una persona adicta descuenta el tiempo entre recompensas de un modo hiperbolico , es decir, prefiere una recompensa ahora que otra incluso si cabe mayor mañana.
Con todo esto la neuroeconomía aplicada a la ciencia de la adicción puede ayudar a entender la dinámica del auto-control y la valoración de y ante los estímulos recompensantes.
Monterosso, J., Piray, P., & Luo, S. (2012). Neuroeconomics and the Study of Addiction Biological Psychiatry DOI: 10.1016/j.biopsych.2012.03.012
No comments:
Post a Comment